lunes, 7 de marzo de 2011

PRIMILLAS en VILLAR de MATACABRAS

 
Existen claros indicios que nos hacen ver el cambio de estación, no sólo a través del calendario, sino por la llegada de las especies que eligen estos Territorio Naturales como lugares de cría y reproducción. Uno de estos lugares, es esta iglesia de Nuestra Señora del Rosario, en Villar de Matacabras.
Sabemos que marzo es mes de movimiento y las borrascas procedentes del suroeste suelen ayudar en los tránsitos migratorios. Y aquí están, recien llegados del continente Africano, los primeros ejemplares de este pequeño falcónido. Fieles a su cita, un año más, los cernicalos primilla -Falco naumanni- se encuentran en La Moraña y Tierra de Arévalo.
Esta iglesia se constituye como uno de los lugares importantes para el asentamiento de primillas. Merece prestarla atención, además, ya que su construcción es antigua y mantiene rasgos de su otrora marco de esplendor y nos estamos refiriendo a su estilo románico-mudéjar.
La presencia del cernícalo primilla no pasa desapercibida. Son muy característicos los sonidos que emite, a diferencia del otro cernícalo residente, el vulgar -Falco tinnuculus- así como su habitual presencia sobre edificaciones de diversa índole. En la imagen dos primillas planeando sobre uno de los tejados. A la izquierda, con plumaje más pardo y menos vistoso la hembra y a la derecha con su peculiar coloración sobre la cabeza un precioso ejemplar macho.
Hoy hemos tenido una agradable visita que estuvo un rato merodeando por el lugar, se trata del milano real -Milvus milvus-. Siempre estuvo escoltado y acompañado, no podía ser de otra manera, pues a los huéspedes conviene dispensarles el mejor trato.
Hermosa imagen del vuelo de este ejemplar de milano real perteneciente a la familia Accipitridae.
Las últimas obras de mantenimiento y en parte reconstrucción de este pequeño templo, tuvieron en cuenta que albergaban una colonia de primilla de gran interés. Era evidente y necesario acometer los problemas de goteras así como el saneamiento de la techumbre en el exterior y en el interior. Se dispusieron, como se puede apreciar, unas tejas diseñadas para este fin, con el objetivo de permitir la presencia del cernícalo primilla y evitar problemas futuros. Al primilla le gusta hurgar entre las tejas y criar bajo su abrigo. Esta disposición de las tejas viene a denominarse primillares, en relación a los antiguos palomares, los cuales se aprovechaban para la cría de palomas en semi cautividad.
Imagen en la que se puede apreciar la abundancia de tejas preparadas para dar cobijo a los primillas.
Por último, destacar que existe una cámara web, a disposición en el Centro de Interpretación de la Naturaleza de Madrigal de las Altas Torres, desde donde se puede hacer un mejor seguimiento de esta especie durante el tiempo que permanece en la zona. Villar de Matacabras es un anejo de Madrigal y aprovechamos estas líneas para saludar a sus gentes y recomendar una visita tranquila a los cernícalos primilla, evitando molestias innecesarias y a la Llanura Cerealista que se extiende a lo largo de kilómetros a la redonda.